Te cuento los pasos para destruir esa creencia que te mantiene chiquita y cómoda.
Ejercicio 1:
1. ¿Qué hago cuando algo me encanta y quiero que los demás lo sepan?
2. ¿Qué haces diferente de eso que escribiste antes, cuando estás vendiendo? ¿Qué sentís, haces y decís cuando vendes?
3. ¿Cómo podrías hacer para hacer lo mismo que cuando compartís algo que amas cuando vendes?
4. Entonces ahora vos ¿Qué necesitas para que ese cambio suceda?
Ejercicio 2:
Los vendedores más exitosos se preparan antes de salir a vender, una de las partes de ese proceso consiste en describir con muuuucha claridad las características y los beneficios de lo que están vendiendo. Esto también es lo que yo hago.
Agarra una hoja y de un lado vas a escribir Características y del otro beneficios.
Ahora las características son los elementos físicos de tu producto o servicios, eso que se puede medir, pesar, contar.
A cada una de esas características le corresponde al menos un beneficio, nuestro trabajo como vendedoras apasionadas es encontrarlos.
Ahora te toca a vos y cada vez que se te venga a la cabeza esa creencia de que no servís para vender o que no sos buena, por favor, por favor, por favor empezá a buscar tooodas las evidencias de que no es verdad, de que hasta aquí ya estuviste vendiendo, nada más que no te dabas cuenta y que lo que te falta es simplemente prepararte mejor para vender.
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Nos vemos en el próximo!!!
