Prometió un México diferente sin embargo, la violencia no solo no cesa sino que aumenta; la fábrica de pobres sigue en su apogeo con programas sociales que solo buscan votos; una crisis económica y laboral sin precedentes que evade con discursos llenos de mentiras perversas; una pandemia tratada con irresponsabilidad que se junta con un sistema de salud ineficiente y sin medicamentos; un feminismo y una cultura de género desdeñada y una corrupción que empieza a conocerse de sus más cercanos colaboradores.