En este episodio hablamos con un viticultor de Canelones, que como tantos otros continuó el legado familiar en el campo. De chico le gustaban las máquinas y los animales, pero la viña siempre estuvo a su lado, y de manera natural ha dedicado su vida a esa actividad. Es un tipo tranquilo y de voz pausada, que cultiva la paciencia en su rol de presidente del centro de viticultores del Uruguay, un gremio que agrupa a casi la mitad de las empresas del rubro. Hoy, en RADIO TANNAT, les presento a Fernando Imperiale.