En este episodio, José Luis Flores, nos habla de cómo las comunidades indígenas siempre han aparecido en la historia de manera casi accesoria, actores secundarios de la comedia nacional.
Reconocer a las lenguas indígenas representa reconocerlos, situarlos frente a ellos, representa un intento por legitimar sus formas de expresión y con ello se reconoce la existencia de otras formas de ver el mundo.