Listen

Description

Traducción del texto del libro Divines Names. “Using this book”. Pg.17-19. La recitación de los Nombres Divinos es una forma de recuerdo de Dios, o dhikr Al usar los Nombres Divinos, al repetirlos, el espejo del corazón se pule del óxido de los pensamientos y actividades mundanos para que nuestra esencia, nuestra luz divina, se muestre libre de cualquier distorsión y en todo su brillo. Se recomienda, especialmente al principio, decir los Nombres Divinos en voz alta, de tal manera que podamos escuchar nuestra propia voz. El Nombre Divino se mueve y resuena en todo nuestro cuerpo, a través de todo nuestro sistema. Lentamente, nuestra voz y la vibración inherente del nombre se acercan, y la esencia de ese nombre comienza a conmovernos. A menudo experimentamos varias formas de resistencia, pero también un eco intenso dentro. A veces, un Nombre Divino tocará precisamente ese lugar donde estamos separados: de la conciencia de nuestra alma, de nuestra familia, nuestra comunidad, de la humanidad, de Dios, de la existencia eterna que lo abarca todo. El campo del subconsciente se toca porque este es el lugar de nuestra herida de separación, la herida que tratamos de proteger a toda costa, a veces por los medios más complejos.

Cuando trabajamos con los Nombres Divinos, podemos elegirlos para tocar una debilidad, tocar lo que falta, para que nos demos cuenta y lo integremos en la totalidad de nuestro ser.
Alternativamente, podemos elegirlos para estimular y desarrollar una cualidad innata y ya fuerte en nosotros. Esta cualidad comienza a extenderse por todo nuestro ser, dándonos la fuerza para recurrir a nuestras áreas más débiles y heridas.

Es importante mantener un enfoque equilibrado. La insistencia excesiva en lo que nos falta puede matarnos de hambre, mientras que el ego puede explotar la concentración e en lo que tenemos en abundancia.

Descubrir nuestra verdadera naturaleza, ese ser, esa alma que es una imagen de lo Divino, convertirse en un individuo intacto, integrado es la inspiración transmitida por los Nombres Divinos. Cada Nombre Divino está lleno de vibraciones divinas que se reflejan en todo lo que nos rodea. Nos protegen e impregnan nuestro cuerpo y todo nuestro ser.
Cada sílaba de un Nombre Divino contiene resonancia que transforma la atmósfera.

La contemplación de los Nombres Divinos conlleva un di de paz y felicidad, alejándonos de lo mundano y hacia lo Divino.

No deberíamos esforzarnos ni tratar de alcanzar ningún objetivo específico cuando repetimos un Nombre Divino. Más bien, debemos intentar ser sinceros, sentir nuestro amor por Dios y hacer que nuestro corazón esté disponible para este poder, abierto, lo percibamos o no. A pesar del poder de los Nombres Divinos, quizás no sentiremos su efecto de inmediato, pero los resultados vendrán. Podemos cambiar las cosas recitando los Nombres Divinos, cantándolos o repitiéndolos en silencio. No hay tiempo fijo o limitado para practicar.

Podemos dejar que los Nombres Divinos acompañen y fluyan a nuestro corazón todo el día. Entonces el corazón comienza a vibrar y gradualmente se hace cargo del canto de nuestra lengua, y luego nuestra alma comienza a repetir el sonido que ha estado anhelando, durante tanto tiempo. Siempre que pueda, cultive la contemplación de lo Divino. Puede hacerlo durante cualquier actividad, aunque es más fácil con una actividad física que no implique trabajo mental. Se ha demostrado científicamente que la práctica regular de la meditación ayuda a nuestra salud mental, emocional y física de muchas maneras diferentes, a la vez que beneficia nuestra vida diaria de una manera profunda e inspiradora.
...
Esta es una búsqueda con los ojos del corazón y la luz de la mente, uniendo dignidad y alegría, uniendo este mundo y el más allá, uniendo lo visible y lo invisible. ...