San Juan 6,52-59
Jesús se presenta como “el pan vivo bajado del cielo”, el
evangelio, la Palabra de hoy nos presenta el alimento de salvación, nos muestra
cuál es el camino que tenemos que seguir para ir a vivir con Dios: comer la
carne del Hijo del hombre y beber su sangre y esto es el verdadero alimento,
habrá Vida Eterna en nosotros cada vez que accedemos a este sacramento de la
eucaristía.
Cristo ha querido quedarse de ese modo con nosotros, su
presencia nos va a conducir siempre al Padre; y hablando del Padre podemos
decir que Jesús siente siempre ese deseo de hablar de Su Padre, lo hace con
orgullo, con cariño, con ternura, algunos dirían casi obsesivamente no para de
hablar de Su Padre: “es mi Padre el que les da Vida Eterna”, “yo vivo por el
Padre” es otra de las expresiones de Jesús.