Hoy hablaremos de cómo tu mentalidad, si es fija o si es de crecimiento, te hará percibir la realidad que te rodea de una o de otra forma. Una persona con mentalidad fija es aquella que tiene creencias según la cual su vida ya está definida desde que nace. Piensa que tiene un grado de inteligencia que marca un límite y por eso, no tiene sentido cultivarla ni enriquecerla. Estas personas perciben el fracaso como una sentencia de que son incapaces. En cambio las personas con mentalidad de crecimiento, son personas que creen que la vida es un proceso en el que el fracaso no solo es inevitable, sino, además, indispensable por el gran aprendizaje que nos aporta. Ven el fracaso como un intento fallido, que ofrece experiencia.