¡Estoy muy feliz y agradecida de llegar al final de la tercera serie!
Llegamos al último de los 4 inconmensurables, la ecuanimidad.
En esta meditación buscamos regresar al verdadero conocimiento en donde la percepción y el juicio ya no nos rigen, ya no determinan nuestra realidad.
Somos capaces de disolver en nuestra mente la ilusión de polaridad del mundo y regresar a ese estado de perfecta ecuanimidad, entregando al mundo y cultivando dentro de nosotros amor y luz.
¡Gracias por construir esto conmigo y por ser mi inspiración!
Si algún tema que te gustaría trabajar en meditación, me encantaría leerte.
¡Te mando un abrazo lleno de amor, deseo que hoy y siempre vivas en tu grandeza!
Con Amor. Sofi