Liderar, negociar y vender tienen algo en común: son juegos de confianza.
Si tu equipo no confía en vos, no te sigue.
Si el otro negociador no confía en vos, no cierra.
Y si el cliente no confía en vos, no compra.
La confianza no se gana hablando; se gana escuchando, cumpliendo y demostrando.
¿Qué hacés cada día para construir confianza?