El asesinato racista de George Floyd fue la chispa que encendió la pradera de la rebelión en EEUU. Mientras algunos nos quieren distraer con la privatización de los cohetes al espacio o las boludeces que dice Susana Giménez, "no puedo respirar" se volvió el grito de guerra de los explotados y oprimidos. En homenaje al trabajador de 46 años George Floyd, asesinado por la policía Racista yankee.