Hablar de Maradona es hablar de tantas cosas.
Mítico, humano, imperfecto. No Dios. No me gusta ese adjetivo que lo pone en un nivel exagerado, cuando precisamente siempre sus polémicas fueron por cosas tan banales, básicas y terrenales como las drogas, los vicios o el sexo.
Pero con todo y su eterna polémica, a mí Maradona me dejó algunas enseñanzas. Aquí te las comparto.
Y a ti... ¿no te enseñó nada "El Pelusa"?