Salmos 30:11. Tú cambias mis lágrimas en danza; me quitas la tristeza y me rodeas de alegría.
Salmos 40:1-3. Puse en el Señor toda mi esperanza; él se inclinó hacia mí y escuchó mi clamor. Me sacó de la fosa de la muerte, del lodo y del pantano; puso mis pies sobre una roca, y me plantó en terreno firme. Puso en mis labios un cántico nuevo, un himno de alabanza a nuestro Dios. Al ver esto, muchos tuvieron miedo y pusieron su confianza en el Señor.
Lucas 1:37. Porque para Dios no hay nada imposible.
Esperamos que esta Gota se convierta en un Manantial de Vida para ti. ¡Bendiciones!