La palabra de Dios me a permitido pasar por cuatro diferentes etapas para así poder llegar a tener la claridad sobre el propósito de mi vida. Propósito que es:
Hacer la diferencia sirviendo a los demás como lo haría Jesús.
Pero tengo que aceptar que no fue tan claro en un principio y mucho menos cuando empecé a leer la Palabra de Dios, recibí a Jesucristo como salvador rey y señor de mi vida en el ano 2004, y decidí en ese momento leer la biblia, y claro no entendí nada, por no entender , no deje de leerla, fue la primera vez en ese ano que leí la biblia completa me tomo casi todo un ano poderlo hacer, pero no quedo nada en mi, y tengo que aceptar que lo hice después de un tiempo, como algo que debía cumplir, si ya lo había empezado pues lo terminaría, la motivación no fue nunca conocer, y menos cambiar estaba mas bien del lado de dar un check a eso, y así lo hice.
Y por muchos anos nunca mas volví a abrir la Biblia y si me preguntaban que si leía la palabra de Dios, mi respuesta era, ya la leí.
Y hago énfasis en decidir cambiar, por que efectivamente la circunstancia que me llevo de rodillas a Jesús en ese momento se resolvió, por lo tanto, no veía necesidad de cambiar en otras áreas de mi vida, y mucho menos llegar a pensar en soltar el control de mi vida para dárselo a Dios, de rendir todo, no señor, yo quise y así lo hice por muchos anos seguir al timón de mi vida.
Pasaron 14 anos y al final del ano 2018, veo que todo ese control que creí tener, que las cosas y personas en las cuales había confiado para poder seguir llevando mi vida como yo pensaba y especialmente como quería se esfumaron, y se esfumaron en un momento, en segundos, que nada de lo que me había funcionado en el pasado hoy tenia resultado, y que solamente me hundía mas y mas en el barro que ya me llegaba al cuello.
Pensaba que conocía a Dios, pero era claro que el dios que estaba en mi cabeza y mis pensamientos era el dios que se acomodaba a mis deseos y necesidades.
Y fue en esa condición donde empecé a hacer cosas que nunca había hecho, como ir a una Iglesia y reunirme regularmente y es en enero 2019 con un corazón quebrado y arrepentido, reconociendo que no podía en mis fuerzas resolver algo, que había tomado muchas decisiones equivocadas y que había pecado de muchas maneras, donde empiezo un reto nuevo de Leer la biblia en un ano.
Al iniciar este reto, arrepentido y no pudiendo continuar así, me rindo y suelto el control, decido entregar las riendas de mi vida a Dios.
¿Que si fue fácil? No. ¿Que si termine? No, por que es morir a mi, todos los días de mi vida, por el resto de mi vida.