A mí me encanta hablar de estos temas, porque siento que me hablo a mí misma. Y es que necesito escuchar en ocasiones: “eres grande, pero se supone que sea difícil mi corazón”. Son muchas las veces en las que he tenido esta conversación conmigo. Por alguna razón queremos que sea fácil, que todo salga como esperamos siempre, y que nos den todas las respuestas. Pero nadie, nunca dijo que sería fácil.
Vamos a ponerlo en perspectiva. Imaginemos la vida de las personas a quienes más admiramos. En mi caso, usualmente son personas que me han impactado positivamente. Curiosamente, estas personas tienen muchas cualidades en común: logran lo que se proponen a pesar de las adversidades; piensan en grande; trabajan para manejar su mente y procesar sus emociones; y están dispuestas a caer cuantas veces sea necesario.
