Este episodio nos recuerda que fuimos creados para triunfar sobre las adversidades de la vida. Cada individuo tiene un diseño intrínseco para superar los desafíos que se presentan en su camino. Aquellos que no saben cómo enfrentar la adversidad a menudo encuentran dificultades para lidiar con los desafíos de la vida, lo que puede llevar a la depresión, la angustia y el deterioro de la salud mental y física. Sin embargo, en este capítulo descubrimos que la adversidad no está destinada a destruirnos, sino más bien a revelar nuestro verdadero potencial. Nos invita a ver los desafíos como oportunidades para crecer, aprender y alcanzar nuestro máximo rendimiento en la vida.