Hay personas que te hieren, te venden la solución... y después te convencen de que sin ellos no podrías seguir.
Pero no es ayuda, es manipulación emocional.
No vivas como víctima cuando fuiste llamado a ser protagonista.
Dejá de culpar. Tomá tu responsabilidad.
No naciste para vivir herido... naciste para vivir libre.