Muchos cumplen... pocos trascienden.
La vida no se trata solo de sobrevivir, sino de dejar una huella que inspire.
Abraham, José y Jesús nos enseñan que la trascendencia empieza cuando decidimos vivir con propósito más allá de lo que "nos toca"
Hoy el reto es claro: no te conformes con hacer lo mínimo, atrévete a
trascender.