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Título: "Huyendo de Dios"

Texto bíblico: Jonás 2: 1-10

Jonás es el libro del Antiguo Testamento que nos muestra el propósito de Dios de salvar a los perdidos. Pero sobre todo, nos enseña lo que puede suceder cuando los hijos de Dios llamados a llevar su mensaje para salvación, están desaliniados del propósito de Dios y su voluntad. Entonces Dios puede usar métodos de corrección y disciplina para hacernos volver a su propósito y voluntad. 

¿Cuál es el propósito de Dios al hacernos pasar por procesos disciplinarios?

1- Que clamemos a Él reconociendo nuestra condición (v 1-2).

El clamor de Jonás desde el vientre del gran pez comenzó con el reconocimiento de su situación espiritual por huir de la voluntad y propósito de Dios. El profeta reconoce su estado de ánimo de angustia (desesperación v. 2). Esto no era más que la lucha interna entre su voluntad y la del Señor. Es seguro que podemos experimentar este estado de ánimo por desobedecer a Dios.

También se sintió mucho la frase: "desde el fondo del seol", lugar de los muertos. Literalmente el profeta sintió la muerte física cerca, pero espiritualmente se sintió separado de Dios para siempre. Al reconocer Jonás, su condición, también pudo ver que el proceso era plan de Dios por su desobediencia.

2- Que reconozcamos las pruebas como disciplina de Dios (v.3-4).

El profeta reconoce que todo lo que le estaba pasando era trato de Dios para con él, "me echaste a los profundo" (v. 3). El proceso era fuerte y doloroso. Según narran estos versos Dios hizo tocar fondo a Jonás.

El Señor puede hacernos pasar por pruebas duras para traernos de vuelta a su propósito y voluntad. El gran pez no solo fue el transporte de regreso a Nínive sino también el proceso disciplinario para Jonás. 

Pero en medio de aquella prueba dice el v.4 "Más aún veré tu santo templo". La prueba y la disciplina ayudan para alinearnos con Dios.

3- Que volvamos humildes y dispuestos a Él (v.5-10).

La frase en el final del verso 6 nos muestra la humillación del profeta, "Dios mío", había retornado a su Dios  y a su voluntad.

En el verso 9 revela su disposición, al fin Dios había logrado su propósito: Jonás estaba de vuelta a Él, y a su voluntad. Al final del verso 9 cita parte del mismo verso del Salmo 3:8 que dice: "La salvación es de Jehová". Este salmo nos muestra una gran verdad, el profeta era un hombre de Dios, conocedor de su palabra y capacitado para anunciar su plan. Es por eso que he dejando el verso 8 para el final.

¿Cuantas cosas nos ilusionan y nos alejan de la misericordia, el propósito y la voluntad de Dios? Cristo ha llamado a cada creyente a testificar, la salvación de Dios es su propósito y voluntad.

Quiera Dios, nunca nos desaliniemos del plan salvador de Dios, pues Él puede usar métodos para disciplinarnos y traernos se regreso a su voluntad y propósito.

Pastor.  Nelson Rodríguez Sierra