¿Nunca te has arrepentido de algo que has dicho apenas segundos después de decirlo?. Ninguno de nosotros/as responderá con un no rotundo. Nadie se escapa de haber reaccionado al menos de vez en cuando. En este episodio de Maestría quiero compartir contigo algunas técnicas y consejos que yo mismo utilizo no para evitar reaccionar (protip: es imposible), sino para reducir el tiempo que paso en ese estado donde cedo el control y pasar cuanto antes a otro donde vuelvo a ser dueño de mí mismo.