Era una noche fría, estaba helando afuera y yo mientras tanto te esperaba con la calefacción prendida y mi abrigo abotonado hasta el ultimo botón dentro de mi auto. Había quedado en recogerte a una esquina de tu casa para que nadie te viera, saliste a escondidas esperando que nadie notara tu ausencia. Tenias un poco de miedo, te sentías insegura, era comprensible, salir de tu casa sin avisar a nadie en medio de una noche fria para irte conmigo era algo nuevo, algo arriesgado pero a la vez emocionante y atrevido....
Gracias por Escuchar este Universo Nuestro, puedes leer el texto completo en www.universonuestro.com