🙏🏻 Los primeros ocho versos del Salmo 44, relatan las liberaciones y victorias pasadas que tuvo la nación de Israel, y hace énfasis el salmista en aseverar que todo fue por Dios; por Su poder, por Su mano, en Su Nombre. El ejército sólo fue un instrumento, la gloria y la honra pertenecen al Dios Soberano que se complació en darle la victoria a su pueblo escogido.
🛐 Pero llegan las pruebas presentes, el dolor, la enfermedad, la persecución, los problemas económicos, y allí, en el sufrimiento, Dios sigue siendo bueno, soberano y misericordioso. El salmista entendiendo esto clama en el Salmo 44:26 “Levántate para ayudarnos, y redímenos por causa de tu misericordia”. Reconoce que Dios es soberano y se dirige a Él en oración.
🔥 Hoy hay una iglesia que está siendo perseguida, aún niños lapidados y torturados por no negar su fe, así como en el tiempo de la iglesia primitiva, que eran aserrados, crucificados, quemados vivos, lanzado a las fieras, pero los hermanos permanecían firmes en su convicción de fe, se gozaban de participar de los sufrimientos por causa de Cristo, haciéndose eco de lo que escribió Pablo:
📖 “Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse” Ro 8:18
🙏🏻 No nos olvidemos del nombre de nuestro Dios (v.20-21), ni reneguemos de Él en la hora de la prueba, porque Él está en control y aún el sufrimiento tiene propósito eterno en Él.
🙇🏻♀️ Dios es Soberano en el tiempo de bonanza, calma, victoria, liberación, y Dios sigue siendo bueno, soberano y misericordioso en el tiempo de la aflicción. Vivamos con los ojos puestos en Jesús, autor y consumador de nuestra fe.