✍🏻 El apóstol Pablo aborda la diversidad de los dones espirituales, pues los creyentes corintios abundaban en ellos, pero hacían un uso irreflexivo de los mismos, en vez de ser adultos con herramientas bajo la guía y el poder del Espíritu, eran como niños con juguete nuevo, siendo necesario, imprescindible el crecimiento espiritual.
🔍 El primer aspecto que Pablo argumenta, representa un contraste entre la vida antes de conocer a Cristo, donde eran guiados a extravío, como se lleva a ídolos mudos, sin conciencia, ni discernimiento; con la nueva vida en Cristo, pues nadie puede proclamar el Señorío de Jesucristo si no fuese guiado por el Espíritu Santo. Muchos podrán repetir una oración o incluso decir que Jesús es el Señor, como una mera profesión verbal, de hecho, Cristo mismo dijo muchos me dirán en aquel día: Señor en tu nombre hicimos, dijimos, y yo declararé, nunca os conocí apartaos de mí, hacedores de maldad.
🙌🏻 Pero una genuina conversión, la experiencia del nuevo nacimiento, donde Cristo es realmente el Señor, el gobernante, el amo absoluto de la vida, sólo se produce por la obra del Espíritu. El creyente genuino que confiesa el Señorío de Jesús, dejará todos los ídolos de su corazón y se rendirá ante el Soberano, ante el Dios verdadero, el aspecto importante entonces, es que Cristo es el Señor, lo que se traducirá en unidad de la iglesia en medio de la diversidad de los dones espirituales.
🕊️ El apóstol argumenta que medio de la diversidad de dones, ministerios y operaciones, el Espíritu es el mismo, el Señor es el mismo, Dios es el mismo, y otorga a cada uno conforme a su gracia, para ejecutar su plan soberano, por lo que ninguno es mejor o peor que otro, todos son igualmente importantes de acuerdo al propósito divino.
📌 Pablo menciona que hay diferentes dones, los cuales estaremos estudiando en el próximo devocional, pues los describe en 1 Co 12:8-11. Pero podemos adelantar, que un don espiritual, es aquella habilidad otorgada por Dios y fortalecida por el Espíritu Santo, para cumplir la función específica dentro del cuerpo de Cristo que Dios nos ha asignado a cada uno de nosotros, es decir, que Dios en su soberanía, nos da capacidades para que en dependencia del Espíritu Santo los pongamos al servicio de los miembros de la Iglesia, para la edificación del cuerpo de Cristo.
📌 Así mismo, menciona el apóstol diversos ministerios otorgados por Jesucristo, descrito en Ef 4:11-12 y dice el texto bíblico “y Él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo”.
📌 Y agrega Pablo que hay diversidad de operaciones, de actividades específicas a las que nos dedicamos de acuerdo al plan soberano de Dios el Padre, descritas en Ro 12:6-8 y dice el texto “De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, usese conforma la medida de fe; o si de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría”.
🙇🏻♀️ Como creyentes, individualmente tenemos diferentes dones, ministerios y formas de trabajar, pero Dios es el que pone en nosotros el querer como el hacer por su buena voluntad, de tal manera, que Él no tiene hijos favoritos, pero tampoco tiene hijos sin talentos, a todos nos dotó de capacidades, siendo Él mismo la fuente del don, el modo de administrar ese don, y el poder para utilizarlo, para Su gloria y honra, para la edificación de Su iglesia. No hay cabida para la gloria del hombre, ni rivalidades o competencias entre unos y otros.