Santiago 2:1-13
✍🏻 El autor viene explicando a sus lectores dos principios fundamentales, la fe viva soporta las pruebas y tribulaciones, y además, vence la tentación, porque está cimentada en la Palabra de verdad, se guarda sin mancha del pecado y socorre al necesitado. Ahora va a exhortar a sus lectores en cuanto a las prácticas del cristianismo en la vida cotidiana. En este caso, inicia con la parcialidad, hacer acepción de personas.
📌 Dios no hizo acepción de personas al enviar a Cristo a morir por nosotros (Jn 3:16). Al colocar nuestra fe en el glorioso Señor Jesucristo, siendo hacedores de la Palabra, no deberíamos hacer acepción de personas.
📌 Santiago se refiere a la filosofía del mundo, donde el valor de una persona está determinado por lo que tiene. No se refiere a las posesiones materiales en sí, pues el Señor provee a sus hijos, a algunos beneficios materiales y otros pasan necesidades materiales, conforme a Su soberana voluntad.
📌 “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Al colocar los intereses personales por encima del bien del prójimo, se infringe el mandamiento. El mandato divino nos lleva a buscar de manera intencional el bienestar del prójimo.
📌 La perfecta ley de Dios es la ley del amor, de la libertad.
🤔 Reflexionemos si nosotros ¿Hacemos acepción de personas? ¿Cuál es nuestro concepto del éxito? ¿Será que nos estamos pareciendo al mundo? ¿Estamos tratando con preferencias a aquellos que de acuerdo al concepto del mundo tienen éxito? O ¿Estamos tratando de ser privilegiados, ocupar puestos de eminencia, intentando impresionar a otros?
🙌🏻 El Señor nos exhorta en amor a que no hagamos distinciones entre unos y otros, a que amemos a nuestro prójimo como a nosotros mismos, pues en Él, ya no hay judío ni griego, no hay esclavo ni libre, no hay rico ni pobre, pues todos somos uno en Cristo Jesús.
🎞️ Puedes ver el vídeo en mi canal de Youtube.
Dios les bendiga!
