1 Pedro 1: 22-25: Con la fe y esperanza cimentadas en Cristo, la manifestación exterior es el amor.
🙌🏻 La respuesta de la vida santa que debe resultar del nuevo nacimiento se aplica a tres áreas:
📌 Un amor sincero hacia los hermanos.
📌 Arrepentimiento del pecado.
📌 Deseo genuino de crecimiento espiritual.
🛐 Pedro nos exhorta a estar purificados, limpios de nuestros pecados mediante la obediencia a la verdad, la aceptación del evangelio.
🍃 Nacidos de nuevo, no de un padre humano, que sería una herencia corruptible, sino de Dios, que representa la herencia incorruptible.
💟 Por lo que nos constituimos en hermanos en Cristo, dejando de lado los egoísmos, nos amemos sin motivos ni intereses, más bien, profunda y fervientemente buscando el bien de los demás.
📖 Efesios 4: 15-16: “sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor”
✍🏻 La explicación para este amor fraternal, Pedro lo toma de Isaías 40: 6b-8, contrastando la eternidad de la Palabra de Dios, que es viva, perdurable y eficaz, con la caducidad o perecedera naturaleza humana.
🔥 Así como las pruebas refinan la fe, la obediencia a la Palabra de Dios refina el carácter.
🙇🏻♀️ Mantengámonos firmes en el Señor, con la fe y esperanza puestas en Dios; cuya manifestación se verá en el amor hacia el prójimo, hacia los hermanos en Cristo, porque somos todos miembros del mismo cuerpo de Cristo.