✍🏻 El apóstol Pablo continúa exhortando acerca de la actitud de los Corintios ante el pecado. No es buena vuestra jactancia, no tienen nada de que gloriarse o por lo cual sentirse orgullosos; pues la indiferencia ante la práctica de pecado, contamina la pureza de la iglesia local, llegando a confundir y aún a causar divisiones.
🛐 Ciertamente, Pablo no espera que todos estén todo el tiempo sin pecado, pues los cristianos mantenemos una lucha constante contra nuestra propia concupiscencia, pero el apóstol hace referencia a la práctica deliberada de pecado, donde no hay vestigios de arrepentimiento, pues sin la debida corrección, contamina a la iglesia.
🍞 Y utiliza la levadura como ilustración. Unos pocos gramos de levadura, al fermentarse, harán crecer toda la masa, así ocurre en la iglesia local, un poco de pecado sin la debida amonestación, terminará contaminando la santidad de la congregación.
🙌🏻 Gracias a Dios que Él no fue indiferente ante nuestra condición, pues de lo contrario, aún seguiríamos muertos en delitos y pecados. El Padre con su gran amor con que nos amó, tomó cartas en el asunto, envió a Jesucristo a pagar el precio de nuestras transgresiones; el Dios santo, justo satisfizo la demanda de ira por el pecado en el sacrificio perfecto de Cristo, justificándonos por la fe, se acercó a nosotros y nos dejó el Espíritu Santo que guía nuestro diario andar.
🙇🏻♂️ No seamos indolentes o indiferentes ante el pecado del hermano, mostremos el amor al prójimo amonestándonos, exhortándonos en amor para la mutua edificación.
📌 “Limpiaos pues de la vieja levadura” es decir, deséchenla, remuevan la vieja levadura, amonesten, exhorten en amor para edificación al que practica pecado, para conducir al arrepentimiento, apliquen la disciplina oportuna y pertinente para evitar que la iglesia sea contaminada, para que realmente se manifieste que somos nueva masa, sin levadura, sin contaminación de pecado.
✝️ Luego de la celebración de la pascua, seguía la fiesta de los panes sin levadura. Cuando los judíos estaban en Egipto, fueron librados de la muerte por la sangre del cordero aplicada en los dinteles de sus casas, al celebrar la fiesta debían comer panes sin levadura; esto era figura de Cristo, el verdadero Cordero pascual, que se inmoló, que pagó el precio por nuestras rebeliones, para salvarnos de la muerte eterna, para que el juicio de Dios pudiera pasar de largo sobre nosotros.
🙇🏻♂️ Ahora nos corresponde vivir consagrados para Dios en santidad, libres de todo peso y del pecado que nos asedia, libres de la levadura del mundo.
📖 1 Pe 1:17-19 dice “y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación; sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación”.
🔥 Hemos sido salvos para ser santos, la evidencia de la salvación en nuestras vidas, será el crecimiento en el proceso de santificación progresiva. La buena noticia es que no estamos solos en este proceso de consagración, el Espíritu de Dios nos guía, consuela y sostiene.
🙇🏻♀️ Alimentemos nuestra mente y corazón con la Palabra de Dios, meditando en ella de día y de noche, orando en todo tiempo, siendo favorables a la obra transformadora del Espíritu en nuestras vidas e intencionales en la lucha contra la propia concupiscencia, presentándonos como sacrificio vivo, santo, agradable a Dios. Cristo viene pronto por su iglesia pura, santa sin contaminación.