Desde la infancia , viví y recorrí grandes momentos, lugares maravillosos y cada uno ejercía vitalidad al recordarlos, algo fantástico, la vida que soñé, mi madre tan decidida me brindaba el confort de la libertad, y fuerza en la toma de decisiones; mi padre que orgullo, lleno de valores tan maravillosos , me reafirmaba que el amor era un arma un tanto peligrosa. Las etapas de mi vida, fueron únicas más la fuerza siempre era mi carta de presentación, con la que conquistaba al mundo, recuerdo ese 16 de diciembre donde conocí, a Mi gran amor Mi tesoro, así era un tesoro, un hombre extraordinario, un encantador, lleno de picardía, apasionado e inteligente, elementos de tanta importancia para mí, aunado a un gran emprendedurismo familiar. Llego el amor, creció la entrega y el lazo de unión nos ató como nunca, recuerdo sus palabras tan fascinantes, donde sentía el valor de un hombre satisfecho por mis éxitos, notando que en cada palabra, caminaba tras una sumisión disfrazada.
Cada Palabra que decía a mi oído, llegaban y destruían mis recuerdos, de una mujer de poder, note que mi amor, se torno en un gran depredador, quien se alimentaba de mi risa, me robaba energía, y tatuaba cicatrices emocionales tan determinantes en mi vida, cada amanecer era gris al escúchale decirme: “no vales nada, eres el error más grande que llego a mi vida”, calle tanto para no decepcionar a mis padres, sentí que solo debían observar, las virtudes mi depredador. Mi espejo se tornó en un blanco y negro donde, la persona que se refllejaba no valía, tanto maltrato verdad, me sentía perdida y sabia que me encontraba en un gran peligro , que era vivir una bestia peligrosa, un enorme depredador, quien mataba mi espíritu y mi corazón.
Después, de un tiempo perdí mi identidad, y decidí huir, perdida sin fé, sin saber dónde encontrarme, siguió el acoso y la humillación en mensajes, en ofensivos comentarios; internamente la magia de mis progenitores me dieron la fuerza, y los busque humillada y avergonzada regrese, era insólito ni sabia donde estaba mi corazón, mi dignidad, llore con intensidad, sin embargo tomé fuerzas, ya que, siempre mamá estuvo en mi mente con esa clave del éxito: “eres libre vuela y alcanza tus sueños, suelta lo que oscurece tu camino”, y decidí ir por el depredador preparada, gracias a la Fé valor de poder que mis padres me dieron, sentimientos de éxito de mi madre, reconstruyeron mi sonrisa, sentía la placidez de encontrarme y me abrace. Era el gran día, lugar pautado y allí estaba mi depredador, me acerque y el preparado para atacar le mostré mi energía y dije basta te robe mi corazón porque era mío , y note que fueron devastadoras mis palabras, y de allí saqué el:
Hasta aquí he llegado,
Hasta aquí tu maltrato
No más tu maltrato , no más Humillaciones hoy quedas fulmino, y sentí que absorbí mi energía, me encontré y recuperé mi alma, y me despedí con: se acabó la lastima me encontré, y estoy en la mujer valiosa que salió de las garras de un gran depredador que no vale nada .Adiós.
en mi puño, la sonrisa
