Vivimos tiempos de egoísmo de ensimismados, creemos que todos deben caber en nuestro mundo ideal y forzamos a encajar en un grupo, en un ambiente y dejamos de pensar en soluciones, pues estas ya están definidas en nuestra mente sin considerar al otro, hemos olvidado los acuerdos y nos hemos olvidado de nosotros mismos.