Listen

Description

Hola, soy Gloria Cano, tu coach de respiración y te doy la bienvenida al episodio 111 de #Para y Respira.

Hoy vamos a practicar una respiración para soltar. Y tiene que ver con elegir una situación, una dificultad, o un temor y trabajar con ellos, preguntando a nuestro cuerpo qué siente y cuál es la acción a tomar que surge desde esa sabiduría más profunda de la corporalidad.

Comencemos…

Esta práctica puede hacerse en cualquier momento y lugar. No obstante, yo sugiero que lo hagas en un lugar tranquilo donde no te interrumpan. Si quieres puedes cerrar los ojos, o también puedes suavizar o bajar tu mirada para que puedas poner toda tu atención en tus sensaciones corporales.

Siéntate con la espalda recta y separada del respaldo de la silla. Pon ambos pies en el piso y toma consciencia de la Tierra que te sostiene y te acoge sin restricciones. Siente el piso, mueve los deditos de los pies, cómo se siente el piso y ve tomando consciencia de tu cuerpo, cómo se sienten las piernas, las rodillas, los muslos, cómo se siente la silla en la que estás sentado/a, cómo se siente la cadera apoyada en esa silla, cómo se siente la pelvis, la cintura, la espalda, el pecho, las manos, los brazos… como se siente el cuello, la cabeza… nos damos cuenta que estamos vivos… estoy respirando, estoy vivo… esta estructura fisiológica que soy yo, funciona maravillosamente, me tiene acá donde estoy…

Inhalo… estoy vivo

Exhalo… sigo vivo

Te voy a pedir que elijas una situación que te inquiete, te preocupe o te produzca temor… puede ser algo pequeño, una incomodidad o algo más grande… y tráelo a tu consciencia en este momento….

Ahora haz el ejercicio de imaginar que puedes sostenerlo en tu mano, que puedes tomarlo en tu mano, y lo puedes mirar y manipular, le puedes dar vueltas, lo puedes conocer usando el sentido del tacto… como si pudieras poner en tu mano la situación … ¿cómo se siente cuando la pongo en mi mano, la toco y la manipulo? ¿qué sensaciones corporales distingues? …

Simplemente respira lenta y profundamente por la nariz, sosteniendo esa situación, esa incomodidad, ese miedo en tu mano, e invítale a respirar contigo…

Inhala… Exhala…

Sigue haciendo respiraciones lentas y profundas sosteniendo esa situación, esa dificultad, ese miedo, en la mano… y pon atención a cómo se siente tu cuerpo, cómo se siente en tus manos esa situación y pon atención a cuál sería el movimiento que tu cuerpo te sugiere hacer con esa situación…

La tienes en la mano y puedes hacer lo que quieras con esa situación.

¿Cuál es la señal que el cuerpo me está dando?

Lo quiero conservar junto a mí, lo quiero seguir sosteniendo en mi mano, quiero apretarlo, lo quiero depositar en algún lugar, lo quiero entregar a alguien, quiero guardarlo en algún lugar lejos de mi vista, quiero arrojarlo lejos de mí, fuera de mi vida… quiero que alguien me lo quite…

¿cuál es la acción que me sugiere el cuerpo. Solamente observamos eso…

Ahora le damos las gracias al cuerpo por esa pista, esa orientación de qué hacer con esa situación, ese miedo, esa dificultad … le agradecemos también a la situación, la dificultad, al temor por servirnos de maestros en ese momento de nuestra vida.

Y si, en este momento, sientes el impulso de realizar esa la acción, vamos a dar ese paso, realiza ese primer movimiento que desencadenaría una acción más amplia frente a esa situación.

Si todavía no sientes el impulso de ejecutar el movimiento, eso es legítimo también…

Nos despedimos de la situación y orientamos nuestra atención hacia otro lugar y otro entorno.

Inhala y saborea la sensación que este momento de soltar trae para ti. 

Exhala y comparte con el mundo esta sensación …

¡Gracias por practicar conmigo! Y recuerda que estoy atenta a tus comentarios y sugerencias sobre la práctica.