Hola, soy Gloria Cano, tu coach de respiración. En esta tercera temporada de #ParayRespira hemos practicado ejercicios para apreciarte, disfrutar el momento, estar presentes, irradiar benevolencia y recibir con agrado.
Esta semana para el episodio 53 te invito a respirar y acoger.
Te preguntaste alguna vez ¿qué significa acoger? o ¿cómo es que las personas nos sentimos acogidas en ciertas circunstancias, o con ciertas personas y con otras no?
Pues es porque acoger tiene que ver con admitir en casa, aceptar, dar albergue, refugio, proteger y esto se logra cuando uno abre su espacio para recibir, cuando desea que el entorno sea seguro, cálido, agradable no sólo para uno sino para los demás.
Así que hoy vamos a respirar y acoger, para entrenarnos no sólo en acoger a los demás sino en acogernos a nosotros, abriendo espacio en nuestro interior para admitir, aceptar y dar albergue a nuestros sentires, pensamientos y acciones.
Comencemos…
Si puedes siéntate cómodamente y separa tu espalda del respaldo de la silla. Cierra los ojos, excepto si estás conduciendo, manejando maquinaria o cuidando de algo o alguien que requiere tu atención y vigilancia.
Vamos a hacer 3 respiraciones profundas tomando y soltando el aire por la nariz,
tomamos el aire y el abdomen se expande… soltamos el aire y el abdomen se contrae…
tomamos el aire y el abdomen se expande… soltamos el aire y el abdomen se contrae…
tomamos el aire y el abdomen se expande… soltamos el aire y el abdomen se contrae…
Ahora vamos a llevar nuestra atención a nuestro corazón, si te es más fácil puedes poner las manos sobre el pecho y eso te puede ayudar a concentrar tu atención en tu corazón.
Vamos a hacer respiraciones largas, profundas, tomando el aire por la nariz, sosteniéndolo mientras acogemos y luego soltándolo lentamente por la boca como si estuviéramos soplando una velita…
En cada respiración vamos a acoger, es decir, vamos a admitir, aceptar y dar albergue a nuestros sentires, emociones, pensamientos, acciones y circunstancias.
Toma el aire por la nariz y repite mentalmente:
Yo acojo mis sentires…, sostén el aire y ahora suéltalo lentamente por la boca como soplando una velita mientras acoges tus sentires y disfrutas esa característica tuya de sentir tu cuerpo.
Va la segunda… Toma el aire por la nariz y repite mentalmente:
Yo acojo mis emociones…, sostén el aire y ahora suéltalo lentamente por la boca como soplando una velita mientras acoges tus emociones y disfrutas esa característica tuya de fluir con tus emociones.
Va la tercera… Toma el aire por la nariz y repite mentalmente:
Yo acojo mis pensamientos…, sostén el aire y ahora suéltalo lentamente por la boca como soplando una velita mientras acoges tus pensamientos y disfrutas esa característica tuya de pensar.
Va la cuarta… Toma el aire por la nariz y repite mentalmente:
Yo acojo mis acciones…, sostén el aire y ahora suéltalo lentamente por la boca como soplando una velita mientras acoges tus acciones y disfrutas esa característica tuya de actuar.
Va la quinta… Toma el aire por la nariz y repite mentalmente:
Yo acojo mis circunstancias, sostén el aire y ahora suéltalo lentamente por la boca como soplando una velita mientras acoges tu vida en este momento y disfrutas de tu capacidad de sentir, emocionarte, pensar y actuar.
¿Cómo te sientes? ¿Notas una sensación de más liviandad, de bienestar o de relajación? Ese es el poder de Respirar y Acoger.
Puedes hacer esta pausa tantas veces al día como lo desees, resulta muy útil cuando estás preparándote para una reunión y también cuando vas a comenzar una actividad que requiera toda tu creatividad, tu atención y sabiduría.
¡Gracias por practicar conmigo! Y recuerda que estoy atenta a tus comentarios y sugerencias sobre la práctica.