Hola, soy Gloria Cano, tu coach de respiración.
En esta tercera temporada de #ParayRespira hemos practicado el aprecio, el disfrute, la presencia, la benevolencia, el recibir, el acoger y esta semana la invitación es: Respira Gratitud.
Puedes hacer esta pausa y Respirar Gratitud tantas veces al día como lo desees, resulta muy útil cuando comienza el día, cuando algo maravilloso sucede, cuando estás cambiando de actividad, cuando te encuentras con alguien o cuando te sientes con el ánimo bajito y necesitas recargarte de energía para continuar con tu día.
Comencemos…
Si puedes siéntate cómodamente y separa la espalda de la silla. Cierra los ojos, excepto si estás conduciendo, manejando maquinaria o cuidando de algo o alguien que requiere tu atención y vigilancia.
Lleva tu atención a tu corazón, si te es más fácil puedes poner las manos sobre el pecho y eso te puede ayudar a concentrar tu atención en tu corazón.
Ahora vamos a hacer 3 respiraciones largas y profundas tomando y soltando el aire por la nariz. Yo voy a marcarlas pero la idea es que las hagas a tu propio ritmo…
Va la Primera….
Va la Segunda….
Va la Tercera….
Ahora pon tu atención en algo que quieras agradecer, puede ser cualquier cosa desde muy, muy grande hasta muy, muy pequeña, yo voy a agradecer por todos los sonidos que puedo escuchar; tu puedes elegir cualquier cosa, persona, mascota, situación.
Ahora con toda la atención en lo que elegiste vamos a hacer 3 respiraciones largas y profundas, tomando y soltando el aire por la nariz, agradeciendo la presencia de esa cosa, persona, mascota o situación en tu vida.
Vas a tomar el aire y al soltarlo dando gracias por lo que elegiste agradecer, repitiendo en voz baja para ti…
Gracias por….
Gracias por….
Gracias por …
¡Listo! Eso es todo lo que necesitamos hacer.
Si quieres puedes repetirlo con diferentes cosas, en varios momentos del día y observar qué va pasando contigo.
Cuando tengas una situación complicada también es bonito hacerlo y respirar lenta y profundamente repitiendo, para ti, cuando sueltas el aire: ¡Gracias por esta situación! ¡Gracias porque siento que llegué al límite! Y esto también sirve porque te instala en la gratitud y te aleja del miedo.
¡Gracias por practicar conmigo! Y recuerda que estoy atenta a tus comentarios y sugerencias sobre la práctica.