Claves del dolor de espalda o lumbalgia
El dolor de espalda baja, dolor lumbar o lumbalgia es un malestar común que experimentan personas de todas las edades y es una de las principales causas de discapacidad a nivel mundial; responsable de ausentismo laboral y limitaciones en las actividades diarias.
Una persona tiene una probabilidad del 60% al 85% de experimentar lumbalgia en el transcurso de su vida. Rara vez se puede identificar una causa específica del dolor lumbar. La lumbalgia es un padecimiento crónico y los cambios en el estilo de vida son la base de su tratamiento.
La exposición a la atención en salud a veces puede tener consecuencias perjudiciales. En el sentido que, descartando el 10% de lumbalgias que necesitan atención médica más específica, la mayoría de estas tienen que ver con nuestros estilos de vida. A pesar de esto se tiende a recetar medicamentos para el dolor o terapias de algún tipo que solo causan alivio momentáneo y olvidan las causas de base de un problema ligeramente benigno pasando a considerarlo un problema que requiere atención médica e incapacitante. Tener una vida físicamente activa es lo que de verdad mejora este tipo de dolor.
Las señales de alerta que nos deben hacer sospechar que el dolor lumbar que podamos sentir puede ser algo más grave, que necesita una evaluación médica más detallada son las siguientes:
La presencia de dolor de espalda repentino en menores de 18 años es una señal de alerta y, aunque la edad avanzada es un factor de riesgo general para el dolor de espalda, la presencia por primera vez en mayores de 50 años debe ser motivo de preocupación. Así como después de algún golpe en el área de la columna independientemente de la edad.
Otros hallazgos de alerta incluyen dolor nocturno o en reposo; fiebre y pérdida de peso.
La presencia de dolor lumbar de nueva aparición en personas que padecen osteoporosis, toman medicamentos anticoagulantes o padecen de algún tipo de cáncer necesita una evaluación detallada ya que puede ser indicador de alguna complicación.
Si la lumbalgia se acompaña de retención urinaria, incontinencia intestinal, disfunción sexual o alteración de la sensibilidad alrededor de la ingle, a través de los glúteos, del perineo o miembros inferiores; o debilidad en muslos y piernas también justifica estudios adicionales.
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La información que se brinda por este medio tiene un propósito puramente educacional. No pretendemos diagnosticar, curar o de alguna otra forma sustituir la ayuda profesional de su médico, nutricionista, dietista u otro profesional de la salud cualificado. Usted siempre debe consultar con un profesional de la salud ante cualquier sospecha de enfermedad o cambios de tratamiento.
