Listen

Description

Es fácil divagar. La atención concentrada en algo que se pierde una y otra vez. No vemos absorbidos por emociones y pensamientos que nos llevan al pasado o al futuro mecánicamente. Con un sencillo ejercicio, tratando durante diez minutos de llevar una actitud atenta y no distraerse, se nos pone de manifiesto que divagamos una y otra vez. 

Divagar sin atención es no llevar las riendas y verse arrastrado por emociones y pensamientos. Es no ser consciente de uno mismo y, por tanto, no es posible un cambio o un desarrollo hecho con intención.

La atención es como una linterna que puede ser dirigida con la intención de alumbrarnos diversos objetos y lograr una transformación consciente. Robustecer la atención lleva implícito tener consciencia durante períodos más amplios.

*****************************

De marioneta a grifo - Blog

https://demarionetaagrifo.blogspot.com