Hemos visto la manera como Jesús se acerca al hombre; ahora, a qué ha venido, y cómo sigue en nuestra vida. Ha venido a ocupar el lugar que le corresponde en nuestra vida, el centro; ¿cómo?, como el alimento espiritual necesario para desarrollar esta nueva vida.
Juan 6: 25- 29
25 Y hallándolo al otro lado del mar, le preguntaron: —Rabí, ¿cuándo llegaste acá? 26 Respondió Jesús y les dijo: —De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis. 27 Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que permanece para vida eterna, la cual os dará el Hijo del hombre, porque a éste señaló Dios, el Padre. 28 Entonces le preguntaron: —¿Qué debemos hacer para poner en práctica las obras de Dios? 29 Respondió Jesús y les dijo: —Ésta es la obra de Dios, que creáis en aquel que él ha enviado.
Cosa tremenda hará Dios con nosotros
