Juan 18:4-7
“Pero Jesús, sabiendo todas las cosas que le habían de sobrevenir, se adelantó y les dijo: ¿A quién buscáis? Le respondieron: A Jesús nazareno. Jesús les dijo: Yo soy. Y estaba también con ellos Judas, el que le entregaba. Cuando les dijo: Yo soy, retrocedieron, y cayeron a tierra. Volvió, pues, a preguntarles: ¿A quién buscáis? Y ellos dijeron: A Jesús nazareno.”
En este pasaje de la escritura encontramos a Jesús que se presenta como el “Yo Soy”, el mismo nombre con el que se dio a conocer a Moisés en la zarza ardiendo cuando le dijo que era “Yo soy el que Soy”. Es el Dios eterno, autosuficiente, omnipotente, omnisciente, que siempre ha existido, que no ha sido creado por hombre alguno, que tiene un propósito en cada uno de sus actos, y no depende de voluntad de hombres.
