Sanar es un acto de amor propio. Nos permite liberar el dolor, transformar nuestras heridas y reconectar con nuestra esencia más auténtica.
Agradecer, por otro lado, es un acto de reconocimiento y celebración. Nos ayuda a enfocarnos en lo positivo, a valorar las bendiciones que tenemos y a construir una actitud de aprecio hacia la vida.
Este episodio es posible gracias a Más Allá de las Banderas, Somos Mujeres” desde el año pasado venimos acompañando esta gran iniciativa cuenta con el apoyo de la Oficina de Población, Refugio y Migración de Estados Unidos.