En su reposo. 08/03/2023. T24. E88.
"Oh Jehová, Dios de mi salvación, día y noche clamo delante de ti".
Sal. 88:1
Día y noche
No hay duda alguna de que el dolor es un gran motivador.
Ante la gravedad de su situación, el salmista expresa que clama a Dios "día y noche".
Y aunque es posible entender la expresión como una hipérbole; es decir, una exageración para hacer notar algo; eso que podemos notar es el sentido de urgencia y el compromiso que adquirió el autor del salmo con su clamor a Dios.
¿Qué lo llevó a ese nivel de compromiso? Su precaria condición.
Fue su angustia, su preocupación, sentirse al borde del colapso, lo que le hizo correr presuroso a buscar el auxilio divino.
De ahí que, sin que sea deseable pasar por momentos dolorosos, sí es posible sacar provecho de los días oscuros.
¿Qué tanto oramos?, ¿qué tanto leemos la Biblia?, o ¿qué tanto estamos buscando agradar a Dios?
La respuesta debería ser siempre a un 100%, pero en la realidad suele ocurrir que bajamos la guardia cuando las cosas parecen ir bien; y es en los días difíciles cuando renovamos nuestra búsqueda incesante de la presencia de Dios.
Luego entonces, no es que sea deseable pasar por las tormentas de la vida; pero si han de venir, y vendrán sin duda, sería mejor sacarles el mayor de los provechos.
¿Cuándo fue la última vez que pasamos una mañana entera buscando a Dios en oración?
¿Cuándo fue la última semana que pasamos día y noche clamando por su presencia?
¿Cuándo desgarramos por última vez nuestro corazón buscando su misericordia?
Quiera el Señor que aprendamos a amarle, a agradecerle su bondad y acercarnos de todo corazón día y noche, con o sin necesidad, solo por disfrutar de su presencia; y que, cuando se presenten los avatares de la vida, estos no nos derrumben o alejen de él, sino que sean la mejor oportunidad para redoblar nuestra búsqueda de su favor.
Ayúdenos el Señor.
Isaí Rodríguez Ruiz
