En su reposo. 15/11/2021. T9. E18.
“¿Por qué me preguntas a mí? Pregunta a los que han oído, qué les haya yo hablado; he aquí, ellos saben lo que yo he dicho”.
S. Juan 18:21
Ellos saben
La forma en que Jesús evade responder directamente la pregunta de Anás, tiene por supuesto la intención de generar incertidumbre en sus captores, pero deja también una lección sobre la forma en que él enseñó.
Sus enseñanzas siempre fueron públicas, abiertas a todo mundo. Su doctrina jamás la predicó a escondidas, ocultando su mensaje.
Como sus discípulos, somos llamados a continuar predicando abiertamente el mensaje del evangelio que él nos dejó.
Pero quizá la mayor enseñanza de este momento se encuentra en el hecho de que Jesús está consciente de que su enseñanza tarde o temprano, tendrá que ser expuesta y defendida por sus seguidores.
Sus discípulos saben su doctrina, conocen sus enseñanzas; y aunque por supuesto que en ese momento había llegado su tiempo para morir por la humanidad, también entiende que “ellos saben”.
Después de todo ese tiempo con Jesús, sus seguidores sabían sus enseñanzas, conocían su mensaje, habían abrevado de su conocimiento y recibido las revelaciones del evangelio.
Es de esperar que la iglesia, que camina con Jesús, que lo conoce en la intimidad, que tiene una profunda comunión con el Maestro, también posea un conocimiento correcto de la verdad del evangelio.
Que oigamos sus enseñanzas, que las comprendamos y que las expongamos al mundo con veracidad.
Que ahora que no está Jesús entre nosotros, cuando nos pregunten sobre sus enseñanzas podamos con claridad compartir su mensaje y llevar a otros al conocimiento de la gracia de Cristo.
“Ellos saben”, es el reto, la invitación de Jesús al mundo para venir a nosotros, y es el peso de nuestra responsabilidad; que en un mundo lleno de oscuridad y doctrinas falsas, evangelios espurios, religiones contaminadas, sus discípulos respondan con efectividad a la necesidad de aquellos que desconocen la verdad que nos ha sido revelada.
Preparémonos para ser esa iglesia, la que tiene el mensaje puro, la respuesta correcta, la palabra de esperanza, la voz que señala el camino al cielo.
Dios nos ayude a ser lo que él espera de nosotros para gloria de su nombre.
Isaí Rodríguez Ruiz
