En su reposo. 30/03/2022. T15. E9.
“Jehová apareció a Salomón la segunda vez, como le había aparecido en Gabaón”.
1 Reyes 9:2
Encuentros
Salomón tuvo el privilegio de encontrarse con Dios al inicio de su reinado, cuando Dios le ofreció darle lo que pidiera.
Pero en esta segunda ocasión el Señor aparece a Salomón con el propósito de confirmar y renovar el pacto con Israel.
En situaciones diferentes, pero en momentos claves, Dios siempre está dispuesto a tener un encuentro personal e íntimo con cada uno de sus hijos.
De acuerdo al momento que estemos viviendo, su primera, segunda o cualquier consecutiva aparición que haga, tendrá siempre el propósito de llevarnos a una cercanía con él y a darnos aquello que necesitamos para seguir siendo fieles.
En ocasiones podrá ser una gracia que necesitamos; en otras, la confirmación de sus promesas; y en alguna más, una llamada de atención para renovar nuestro pacto con él.
Pacto, por cierto, que cada persona y generación necesita mantener en su memoria y renovar en su corazón.
Dios hizo un pacto con Abraham y lo renovó con Isaac y Jacob, y luego con todo el pueblo de Israel.
Esta vez, Dios había hecho un pacto con David y lo renovó con Salomón. Cada uno en su contexto por supuesto. Al rey nacido en Belén el pacto lo enfocó en sus generaciones en el trono, a Salomón, el pacto se centró en la presencia divina sobre el templo edificado.
Pero el principio es siempre el mismo: Dios promete estar ahí para bendecir y prosperar a su pueblo, de quien pide que sea fiel a sus mandamientos.
Hoy, en medio de esa condición específica que cada uno estemos viviendo, es una buena oportunidad para tener un encuentro con Dios.
Uno que renueve nuestro compromiso con él y nos recuerde su fidelidad y amor que trascienden los tiempos y circunstancias que atravesamos.
Él es fiel y sus promesas se cumplirán tal y como su boca lo ha hablado.
Su nombre sea glorificado por siempre.
Isaí Rodríguez Ruiz
