Tres ideas aparecen en este capítulo: elección, pacto y juicio. Resalta la necesidad de ponerse de acuerdo con Dios o con otra persona para poder andar juntos por el camino. También muestra que Dios envía profetas a su pueblo para hacerlo regresar al pacto antes que sea demasiado tarde. Pobre Israel (10 tribus del norte) el año 722 a.C. Marcó su fin porque desecharon su lealtad al pacto con Dios, se alejaron de la rectitud y desecharon la justicia social. El pueblo no prestó oídos a los mensajes de arrepentimiento por parte de Dios.