Es creer o reventar. Misterio con tintes místicos, dónde la lógica racional pareciera quedar excluida. Salto de confianza a lo desconocido. Pocas certezas, muchas dudas. Pero te embarcás igual, te entregás a la aventura, porque el que no arriesga no gana, en una justificación casi total aplicable a cualquier contexto.