Liliana Islas es la propietaria de un establecimiento rural que sufrió el robo número 13 en los últimos dos años. Queda en las cercanías de la Escuela Granja y de allí los cuatreros arrebataron, esta vez, tres novillos. Dejaron en el lugar las cabezas y las patas de los animales. “Ya es alevoso”, criticó Islas quien pide que la policía y la justicia hagan algo urgente. “Para qué pago los impuestos”, se preguntó. “Denuncias hay un montón, pero cuántas personas hay detenidas o presas”, cuestionó la productora. “Lo único que pido es trabajar tranquila. Y por eso pido una solución y respuestas de quienes tienen que darlas. Si no, vamos a terminar como en el Lejano Oeste, saliendo con una escopeta a cuidar lo nuestro”, advirtió.