"Mis ovejas escuchan mi voz, yo las conozco y ellas me siguen..." (Jn 10
¿Qué tan a menudo escuchamos a Dios, qué tanto escuchamos los planes que Dios tiene para cada uno de nosotros? Pidámosle hoy al Señor ser sus ovejas y poder escuchar mejor su voz para seguirlo y saciar nuestro corazón y nuestra vida.
Bendecido martes!