¿Sabías que un abrazo no solo es una demostración de afecto sino también una forma de aliviarse y al mismo tiempo aliviar a otro? Pues sí, el poder de los abrazos gira en torno a esto, es decir, un abrazo es un gesto capaz de aliviar tanto a nivel físico como emocional. De modo que, literalmente, es saludable tanto dar como recibir uno.