En el funeral del Papa Francisco, una imagen se volvió sÃmbolo de toda su vida: sus zapatos viejos y gastados. No el brillo de la gala, sino la huella de una vida entregada. En este episodio, reflexionamos sobre su sencillez, su austeridad, su fidelidad al Evangelio hasta el final. Un testimonio que sigue hablando, incluso en silencio.