El alcalde de Quito, Santiago Guarderas, aseguró que, luego de un informe del Cuerpo de Bomberos de la ciudad, sobre el aforo del partido entre Ecuador y Brasil, se constató el incumplimiento de las medidas de bioseguridad que fueron dictadas por el COE Nacional.
El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) autorizó que el partido se juegue con el 50% de aforo permitido en el Estadio. Esta decisión la tomaron por pedido expreso del presidente Guillermo Lasso, debido a que, en un inicio, se recomendó que el cotejo se juegue sin público en las gradas.
Ante esto, anunció que la Agencia Metropolitana de Control iniciará un proceso administrativo sancionador en contra del estadio Rodrigo Paz Delgado.
Varios usuarios en redes sociales también denunciaron que el aforo permitido no se respetó y compartieron imágenes de las tribunas, donde se registró aglomeración de personas.
Ante esto, la Federación Ecuatoriana de Fútbol publicó el resumen del aforo y boletería y aseguró que el público que asistió al estadio solo llegó al 44,05%.