Listen

Description

No sólo somos salvados del mal; somos salvados para el bien. Dios te crea, te forma, te da dones, te llama y te salva para un propósito. Nada se compara a la emoción de ser usado por Dios para un gran propósito. Es lo que tu corazón anhela más profundamente, y no existe otra cosa que pueda ocupar su lugar. Es la razón por la cual fuiste creado, es la razón por la cual Dios, El Padre envió a su hijo, El Salvador.