1 Tesalonicenses 4.1-12
VIVE PARA AGRADAR A DIOS. No es el privilegio de unos cuantos cristianos super espirituales, una casta que hay en la iglesia. No es cristianismo radical, es cristianismo y punto. Vive así, no importa cuánto tiempo tengas de cristiano, la meta de tu vida no debe ser otra que agradar a Dios en todo lo que haces, no para ganarte nada de Dios, no para ganarte su favor, sino porque ya fuiste favorecido gratis por causa de Jesús.