En el Evangelio podemos descubrir que Jesús defiende a los apóstoles de los fariseos y escribas que los acusan de comer con las manos impuras, es decir, de no lavarse las manos. Es esto lo que Jesús quiere decirte, que día a día Él lucha por ti te defiende, te cuida y te protege, así que te invito para que pongas tu vida en manos de Él, para que no tengas miedo y te proyectes en Dios.