¿Moriré de un golpe en la cabeza o será una lenta agonía? En esos largos metros de descontrol y alta velocidad donde su cuerpo se transformó en un muñeco de trapo, Damir Mandakovic pensó en un millón de escenarios. Él, magullado y fracturado, y su cordada salieron por sus propios medios del volcán Callaqui. Años después de lo vivido, Damir aún combate con el trauma.