Respira con cierta intensidad, tanto para inhalar como para exhalar, así que también acelera un poco el ritmo y respira firme, oxigenándote.
Aprecia el tono ambiental, lo que la naturaleza dice, exclama, manifiesta para ti.Medita sobre esos sonidos, interiorízalos y, por encima de todo, agradece tal presencia, tal comunión, tal compañía.
Por sobre todo, escucha. Escucha lo que es, lo que existe, y escúchate a ti, en tu más dulce expresión de tu silencio, y sosiega los pensamientos, que cada respiro los vaya diluyendo y optes por el entorno, haciéndote uno con tal sonoridad y el tono.
Místico momento, ante tal profusión de creación en la que habitas, siendo eso que eres, guardando quietud, produciendo tu sonoridad con este silencio que marca tu respiro, y esta aventura, esta divina aventura de colocarte en tu presencia, en un espacio así.
¿Cuál sería la necesidad que te sobreviene ante tanto? ¿Qué crees necesitar para integrarte, si en ti mismo eres tanto, igual? Eres una hermosa naturaleza, esa excelsa criatura, eres un ser pensante, sintiente, y estás presente,te has atrevido a habitar, a vivir, a interactuar, a relacionarte, ¿con qué, con quién?
¿Desde dónde se expresa tu voluntad, tu forma de relacionarte? ¿Quién se te acerca? ¿A quién reconoces? ¿Cómo eliges? ¿Cuál sería tu necesidad? ¿Qué mecanismos, cuáles recursos empleas en las que tus relaciones son?
¿Empiezas por las tuyas o por las del otro? ¿Conoces acaso bien tus necesidades? ¿Las sientes así, necesidades?¿O son tus vicios, excesos y hasta exabruptos?
¿Cómo vas e irías definiendo lo que necesitas?
¿Al relacionarte pretendes dispensarlas o recibirlas?
¿Cómo armas una relación? ¿Qué necesitas para establecer una relación?
Más allá de lo que filial es, y si es que acaso desde ahí igual sabes ser tú, a partir de lo que eres y crees necesitar, así como lo que se necesita de ti.
Y cuando te digo armar, es por cómo te dispones. ¿Cuál es tu forma de relacionarte? ¿Natural acaso? ¿Espontánea, libre, transparente? O, por el contrario, ¿regulas, marcas intereses, finges lo que crees necesitar o incluso abusas? Y respiras. Y respiras. Y respiras.
En el respiro, siente tu relación contigo, en lo vital, en lo necesario, en tu reconocimiento, y en lo que conoces de ti.
Continuar la lectura: